Las jornadas de concienciación e información sobre los problemas educativos que pueden aparecen en la adolescencia se desarrollarán durante los días 13 y 14 de junio en Fuenlabrada, en el distrito de Loranca
Los jóvenes, adolescentes y familias del municipio de Fuenlabrada y alrededores podrán disfrutar de talleres, mesas redondas y conferencias, entre otras actividades, donde expertos y catedráticos valorarán la educación actual en la etapa adolescente.
Las jornadas, organizadas por la Asociación Espiral Loranca y con la colaboración del Ayuntamiento de Fuenlabrada, a través de la concejalía de Educación, buscan dar a conocer, mediante expertos y entendidos en la materia, los aspectos positivos de la educación, el modelo educativo de las escuelas taller y analizar los problemas que pueden surgir a los adolescentes en el ámbito educativo.
La orientadora de la Asociación Espiral Loranca, Zuriñe Suárez Hermoso, opina que en la actualidad existe demasiada diferenciación entre el ámbito de lo académico y el del desarrollo personal. “Las políticas educativas no favorecen el trabajo integral con la persona, por lo que queda en manos de la buena disposición del educador realizar un trabajo que vaya más allá de lo meramente académico”. Asegura también que “una de las mayores brechas educativas que existen es la que separa al claustro del centro educativo de los padres/tutores legales de los menores. Un trabajo sin la sinergia de ambos queda, generalmente, descolgado y descompensado”.
Los actos van a contar con la presencia de Luis Casares, voluntario en la asociación, que en su juventud tuvo problemas de adaptación en el colegio y que busca en estas reuniones compartir sus experiencias con los asistentes.
Actividades de las jornadas de la Asociación Espiral Loranca / Foto: Zuriñe Suárez |
Desde la Asociación instan a las familias a implicarse en estas jornadas que buscan la reflexión conjunta de crear espacios que favorezcan el buen desarrollo de los menores. “Nuestro lema, educar en positivo, busca sortear esas dificultades que se pueden generar en el ámbito escolar y conseguir que los alumnos puedan centrarse en las oportunidades positivas que genera y aporta la educación”, explica Raquel Montoro, voluntaria habitual de la Asociación Espiral Loranca.
“La educación es más conflictiva a los 12 años y es bueno que niños que estén entre el rango de edad de los 12 y 16 años asistan con sus padres a estas jornadas y comprueben que nada es imposible” añade Luis, quien busca a través de estas jornadas que los jóvenes con dificultades de adaptación acudan a los talleres programados por la asociación de la que forma parte.
Zuriñe destacó que la asociación “se reinventa cada año” y que, manteniendo sus ejes de actuación, “mantienen la fe en hacer todo lo posible porque todo ser humano salga adelante ante cualquier problema que se le pueda plantear, sea en educación o en cualquier otro ámbito”.
Espiral Loranca está inscrita en las Entidades de Acción Social y Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid y está vinculada en inspiración y línea pedagógica al Instituto de los Hermanos Maristas de la Enseñanza. La sede oficial se encuentra en Loranca pero tienen distribuidos varios centros de información y actividades por los municipios de Griñón, Parla y Humanes.
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