La falta
de cuidadores en el futuro, obligará a que los ancianos sean asistidos por
robots
Los ancianos inundan
con su presencia parques y jardines, a diferencia de lo que ocurría hace 50 años,
que estaban repletos, pero de niños. “El cambio ya está aquí”, señala el profesor
de sociología, perteneciente al departamento
de sociología de la Universidad de Santiago de Compostela
(USC), Bernardo García Cendán.
Campus Universitario. Lugo/PALOMA FISAC |
“La población
octogenaria ha aumentado más del 20% en los últimos diez años, y los españoles
de más de 65 se han incrementado en un 5%”. En cifras, la población española
cuenta con más de siete millones de ancianos, y es ya uno de los países más
envejecidos de la tierra”, añade este profesor de la universidad. Y en
referencia a su tierra, especifica que “el número de personas con más de 60 años
se ha multiplicado por cuatro en el último siglo y medio y representaban a
comienzo del siglo XXI la cuarta parte de la
población gallega”. La progresión es tremenda ya que “en la actualidad los
mayores rebasan el tercio de la población”, añade.
“El envejecimiento de la población española ya tiene, pero
tendrá más profundas consecuencias sociales, políticas, económicas y
culturales, por lo que ya habría que estar preparado”, finaliza García Cendán.
En
Galicia existen además otros problemas. El número de personas con más de 60
años se ha multiplicado por cuatro en el último siglo y medio. “Si hace diez
años los ancianos representaban la cuarta parte de la población gallega,
en la actualidad los mayores rebasan el tercio de la población”, añade.
A lo anterior se suman “las consecuencias del fenómeno
migratorio. Mientras la estructura económica gallega no permite la salida
laboral de los jóvenes gallegos, los emigrantes gallegos retornan a su
‘terruño’ jubilados, con la esperanza de
morir en casa”, explica.
La
avanzadilla japonesa
La Universidad de Tokio
creó a Mamoru,
un robot diseñado para ayudar a personas mayores y a dependientes. Les ayuda a
recordar dónde dejaron sus zapatillas, el periódico, el teléfono, y otras
tareas imprescindibles para su cuidado, tales como la hora en la que tienen que
tomar algún medicamento. Mamoru
localiza los objetos gracias a un amplio ángulo de cámara y un software que le permite reconocer el objeto a seguir.
En un principio, los
ancianos se quejaron porque sus colaboradores no representaban figuras humanas.
Ahora, la
mayoría tiene piernas, brazos y cabeza y realizan movimientos similares a los
humanos.
Existe un robot que se conoce
como lavadora
humana, atendiendo precisamente al objetivo que cumple de
forma satisfactoria. Es muy útil para personas mayores y para discapacitados
físicos. También hay otros que apuntan a lo que será la rehabilitación
del futuro, el traslado
de impedidos físicos de un lugar a otro, .
La UE detrás
La solución por la que apuesta la Unión Europea pasa
también por los robots, quienes tendrán la función de cuidar y auxiliar a la
envejecida
población europea y a los dependientes. Las inversiones para llevarlo a efecto
se producen en el área sanitaria y tecnológica.
La ciencia ficción de
los robots será nuestra realidad en un futuro próximo: los robots vivirán con
nosotros. Su misión será la de cuidar y auxiliar a los ancianos y
discapacitados en sus principales tareas. La Unión Europea está realizando una
fuerte inversión para la investigación robótica en Salud, tal y como lo ha
revelado Sarah Stowe, del Hospital
Universitario de St. James, en el Reino Unido.
Europa plantea la
utilización de robots en el área sanitaria. Persigue un doble objetivo: social
y económico. Se apunta a que dado el envejecimiento de la población europea, es
fácil pronosticar “que cada vez se demandarán más cuidadores y no habrá
suficientes seres humanos para ofrecer esos cuidados”, ha añadido Stowe durante
el LIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Geriatría y
Gerontología (SEGG), recientemente celebrado en
Málaga.
Los beneficios con los
enfermos mentales también son destacables. Los robots han sustituido a los
animales a pesar de sus potenciales beneficios. Los riesgos de alergias,
infecciones o faltas de higiene que presentaban las mascotas impiden su entrada
en muchas residencias. Stowe, concluye que los robots han sido "diseñados
con un sensor que detecta cuando es de noche o de día, para así ayudar a los
pacientes con demencia que han perdido este ritmo natural". Además,
responden a las caricias y tienen hasta pestañas.
¿Lo
frenará la crisis económica?
La crisis económica que
sufre Europa podría ralentizar alguna de estas inversiones. Hoy es
investigación puntera, y por tanto, muy cara. Todos ellos desarrollos
tecnológicos acaban de salir de la fase conceptual, propia de las
universidades. Hasta que salten al mundo empresarial y se conviertan en modelos
comerciales, ancianos, discapacitados y pacientes, pendientes de rehabilitación
todavía tendrán que esperar. Así lo expresa al menos, el geriatra de atención
primaria en el área sanitaria de Lugo
Ángel Martínez-Puga.
Estudiantes
en formación
L a Universidad Carlos III
de Madrid ofrece el grado en Ingeniería
Biomédica . Carmen Fernández está matriculada en segundo. Al
preguntarle por sus intenciones al terminar el grado, indica: “Es una carrera
apasionante. El día de mañana tendremos la oportunidad de hacer aparatos que
permitan hacer operaciones a distancia, diseñar robots que ayuden en las
operaciones, que hagan ejercicios de rehabilitación, implantes dentales y
muchas cosas más”. Y añade el único inconveniente que le ve a su carrera. “Se
dice que los físicos trabajan con tres cosas: masa, carga y tiempo. Los ingenieros
trabajamos con cuatro: las tres anteriores y los euros”, añade.
Los que terminen y se
conviertan en avezados investigadores, requerirán de las inversiones necesarias
para materializar sus proyectos. Las empresas tendrán que involucrarse en esta
nueva industria, que tendrá muchos usuarios.
Cuidar
con otro enfoque
Pese a todas las
ventajas que presentan, los robots generan cierto rechazo por parte de los
cuidadores, que creen que están siendo reemplazados y ya nos son necesarios.
Existen otras razones
de índole diversa para no querer a los robots como ayudantes.
El asilo de Las
hermanitas de ancianos desamparados. Hogar de San Roque
de Lugo
es una institución privada. Carece de subvenciones. Alberga a más de 140
ancianos. Más de un 80% de ellos tienen demencias de distinta clase u otro tipo
de enfermedad que les impide valerse por sí mismos.
Sala de fisioterapia. Hogar de San Roque/PALOMA FISAC |
El centro está equipado
y tiene personal especializado que colabora en el cuidado de los ancianos. “Hay
una enfermera que ayuda en los ejercicios mentales de los enfermos, en terapia
ocupacional. También nos ayuda una asistenta social y una fisioterapeuta”, dice
orgullosa.
El número de ancianos
es tan numeroso en esta provincia que a la pregunta de quién puede entrar,
contesta de inmediato: “Recogemos a todas las personas que lo necesitan. Aquí
se entra sin recomendación. Sólo se pide que lo quieran los familiares, si los tiene”,
detalla.
Por último, dice:
“Nosotras hacemos esta labor que es humanitaria por una vocación religiosa”.
Hola! Es verdad que los mayores necesitan cariño y trato humano, no robótico. Nosotros tenemos un directorio de empresas por si os interesa donde encontrareis academias y centros para la especialización geriátrica. http://www.empresas2.com/directorio/ensenanza-y-formacion
ResponderEliminarSaludos