Existe
un pueblo en España que se autodenomina “una utopía hacia la paz” y ese es Marinaleda,
en Sevilla. Allí es donde el movimiento del 15-M ha realizado el pasado fin de
semana su IV encuentro estatal. Gracias a herramientas de Internet, como
Mumble, Skype o su red social N-1, las comisiones de Elche, Valencia, Albacete,
Pontevedra, Tarifa, Granada, Almería o Murcia también participaron en esta
asamblea estatal. Incluso el alcalde de Marinaleda, Juan Manuel Sánchez Gordillo, participó.
Fueron
muchos los aspectos debatidos y propuestos en este encuentro. Sin embargo, lo
que más se destaca es la disminución de participantes en el movimiento. Cabe
destacar, que a pesar de que el nivel de participación sea inferior al de hace
unos meses, quienes forman parte de las acciones de los “indignados” están
mucho más concienciados e implicados que al principio. Muchos integrantes del
movimiento lo han abandonado estos últimos meses, pero quienes continúan en él,
son mucho más activos y están mucho mejor preparados.
Así
lo indica el portavoz del grupo de trabajo del IV encuentro estatal, José Luis
Cuenca, “en Albacete eran menos de 20 personas, en Granada o Pontevedra unas
10”. Además, añade que “a pesar de ser muy pocos los que estamos continuamente
en acción, lo que nos favorece es que tenemos una dinámica de trabajo ya
establecida y vamos mucho más rápido en cada acción que realizamos”.
Mural con el escudo de Marinaleda // José Luis Cuenca, Marinaleda (Sevilla). |
Cabe
destacar, que gracias a la herramienta de internet Mumble, cada tema propuesto
es tratado a nivel interprovincial, por lo que esto ayuda a acelerar el trabajo
facilitando, así, la coordinación a nivel estatal. El encargado y portavoz de
esta herramienta, David Bravo, indica que gracias a Mumble, “se muestran muchos
avances en temas de ocupación, acciones conjuntas y coordinación de temas
legales”.
En
cuanto a los aspectos negativos que actualmente sufre el movimiento, estos
nacen de que la densidad de actuaciones por parte de los “indignados”. Esto
provoca que el núcleo duro del movimiento se divida, ya que participa en todas
las diferentes acciones. Desde Madrid se explica que es muy difícil que salgan
nuevas propuestas de las asambleas, y que si salen, estas no llegan a los
barrios. Todos los grupos están de acuerdo en que la acampada en Sol unió a muchos,
pero, actualmente, la información se diluye y se pierde. Además, la constancia
es muy importante: hay pocos grupos dispuestos a concienciar y a convocar
manifestaciones de manera regular.
La gran diversificación del movimiento del 15-M se
ejemplifica los próximos días 8 y 10 de diciembre. En Ávila se celebrará el encuentro rural, donde se intentará recuperar y mantener las asambleas de los
pueblos. Además, se celebrará el 10 de diciembre la jornada de “derechos para
todos y para todas”, contra el racismo y a favor de los derechos de los
inmigrantes en las diferentes ciudades del Estado.
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