Las claves para determinar cuales han
sido las causas de que en España se haya pasado de casi una situación de
prácticamente pleno empleo, a alcanzar el 22,85 por ciento de paro nadie las
conoce, por ello no se pueden aplicar soluciones que den salida a la crisis,
ligada básicamente al desempleo.
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| Foto: Miguel del Río Ballesteros |
“El problema
fundamental es el modelo productivo y hay que cambiarlo para avanzar. Aunque rozábamos el pleno empleo la temporalidad no
ha bajado nunca del veinte por ciento. En cuanto aparecieron los primeros
síntomas de crisis, desapareció todo ese empleo precario que afecta sobre todo
a jóvenes, mujeres e inmigrantes. El problema en nuestro país es estructural,
el modelo de crecimiento económico no es el adecuado y es lo que ha hecho que
la crisis en España se cebe con el empleo”, afirma el Secretario de Política
Sindical y Relaciones Laborales de Comisiones Obreras de Madrid (CCOO), José Manuel Juzgado Feito.
El
cambio en el modelo de crecimiento es una de las mayores preocupaciones de los
sindicatos en este momento. La búsqueda del consenso entre todos los
responsables es fundamental y por ello empresarios, gobiernos, oposición y
sindicatos “deben de ver el consenso social como la única salida a la crisis”,
afirma José Manuel.
Reformas que logren mejorar las
condiciones del empleo y cambio en el modelo de crecimiento se perfilan entre
las principales propuestas para salir de la crisis y por tanto generar empleo,
aunque las previsiones es que se tarde muchos años en conseguir.
La reforma laboral de apenas un año de
vida ha demostrado que los cambios superficiales no son suficientes para dar
salida a la tasa de paro más alta desde el año 1995. La precariedad en los
puestos de trabajo es cada vez más evidente y las soluciones que propone la
patronal pasan por abaratar el despido o congelar los sueldos.
El acuerdo laboral firmado recientemente
establece subidas salariales por debajo de la inflación, aunque se insista en
que “es fundamental un pacto en la
determinación de las rentas”, comenta José Luis. “Hay que exigir la reinversión
de una parte de los beneficios empresariales en generar empleo. Además hay que
exigir la subida de sueldos en la medida de lo pactado y se deben controlar
justamente los precios”, afirma.
Sindicatos, empresarios y
gobierno, intentan buscar soluciones a una situación de crisis que bloquea el
capital y por tanto el crecimiento y la contratación.
La última empresa,
víctima del estancamiento económico, ha sido Spanair. La empresa catalana se
vio obligada a cesar sus operaciones, dejando a sus dos mil trabajadores en
paro. “La mala gestión de esta compañía es la que ha llevado al cierre de la
empresa, los más perjudicados al final son los empleados que se quedan en la
calle sin saber que va a ser de sus nóminas o indemnizaciones”, comenta José
Manuel.
Por otra parte el cierre
de la empresa pone de manifiesto la situación del sector aéreo español, algo
que preocupa al Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (COPAC).
Dicho organismo insta a las administraciones a regular y replantear la
situación beneficiosa en la que se encuentran compañías extranjeras que operan
en España. “Expedientes de regulación de empleo y otros ajustas en compañías
aéreas, están haciendo que se pierdan miles de puestos de trabajo en el sector,
a lo que hay que buscar alguna solución”, afirma Elena de la Cal desde COPAC.
Teka, Iveco, Renault o
Air Europa, son solo algunas de la grandes empresas que han solicitado
autorización para llevar a cabo expedientes de regulación de empleo, para
sostener sus instalaciones sin cerrar.
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