A partir de este año todos los que quieran sentarse en un banquillo del fútbol provincial deberán tener acreditación
Los entrenadores
son una pieza muy importante en el fútbol. Sin ellos la práctica
del deporte más practicado en el mundo no existiría, o al menos no
a nivel profesional. Por ello la Real Federación Española de Fútbol ha decidido que ahora también sean un activo esencial en las
categorías inferiores. Para esto se ha redactado un nuevo reglamento
en la materia en el que cualquier persona que quiera instruir la
práctica del fútbol debe ser reconocido como tal con un título.
Cierto es que este debe variar en función de la categoría y
división ya que no es lo mismo entrenar a un equipo infantil a nivel
provincial que a uno de juveniles que deba viajar por toda la
Península Ibérica, pero desde este año es obligatorio que todos
tengan, al menos, el llamado nivel 1.
Esta norma se ha
ido implantando en España durante varios años. De hecho la
regulación estatal ha llegado más tarde que en las comunidades
autónomas donde paulatinamente habían incorporado esta nueva
versión del entrenador. Y es que antes de esta novedosa ley
cualquiera podía entrenar, algo que no era bueno para el fútbol ya
que los niños de los diferentes equipos no podían aprender de
alguien considerado como profesional. Obviamente se habla de los
equipos provinciales ya que los regionales y estatales sí que
necesitaban de alguien con nivel dos o tres, respectivamente, algo
que no ha cambiado.
Reacciones
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| Foto: Flickr |
Sí lo ha hecho,
como se decía, en categorías provinciales donde los entrenadores
ven bien el cambio. Es el caso del míster de los benjamines de la
Agrupación Deportiva Hergar de Salamanca, Ignacio Sanz, que comenta
que de esta manera “se evita el intrusismo”. Él mismo afirma que
era una regla que “se llevaba pidiendo desde hace tiempo” porque
“lo que no puede ser es que los chavales estén pagando por hacer
algo que lo podían hacer en el parque. Necesitan alguien que les
enseñe y para ello se necesitan unos conocimientos como en todas las
profesiones”. Algo similar cree el entrenador de los alevines del
EFMO Boadilla, Iván López, que dice que “alguien no puede cobrar
por algo que no sabe hacer. Entrenar es algo más que poner a los
mejores a jugar”. Lo que no sabe López es que no todos los místers
cobran. De hecho son más los que simplemente lo hacen por pasar un
buen rato y cuyo número, incluso, se ha incrementado con la crisis
económica. Así lo afirma el director del área administrativa de la
Unión Deportiva Pavía de Almería, Manuel Granados, quien asegura
que “el club no paga a sus trabajadores. Nunca lo ha hecho. Y aún
así es mucha la gente que viene preguntando aunque no hayan hecho el
curso”. También desde el Club Deportivo Muníbar Pizarrales, su
presidente, Fernando Hernández, opina lo mismo. “La crisis ha
provocado un aumento de la petición de ser entrenador. Al principio
lo hacen por el dinero aunque luego, cuando se enteran de que no se
cobra, les da igual”, afirma, “a lo que no están dispuestos es a
hacer un curso”.
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| Equipo de benjamines del Hergar. Foto cedida el Hergar |
En definitiva la
crisis ha atraído a numerosas personas al mundo de los banquillos.
Quizás por ello, entre otras cosas, la RFEF ha decidido regular una
ley por la cual se necesite estar acreditado para poder entrenar un
equipo. Algo necesario para muchos desde hace tiempo y que incluso
las comunidades autónomas ya habían implementado con anterioridad
pero que, sin embargo, estatalmente no se había hecho todavía.
Parece una estrategia para que no haya 'overbooking' en los clubes
aunque lo cierto es que esto revestirá en una mayor calidad en el
fútbol base, algo que, seguro, disfrutarán los jugadores.
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