Ana Novella es presidenta de Stop Accidentes, una ONG que nació en el año 2000 con el fin de mejorar la seguridad vial en las carreteras. Está ONG está formada por familiares y amigos de las víctimas de accidentes de tráfico.
Pregunta. ¿Cómo surge esta ONG?
Respuesta. Stop Accidentes surgió tras la muerte del hijo de la anterior presidenta, Ana Maria Campo, que fue atropellado por un conductor borracho en Barcelona... Tiene su origen en la desesperación, recogiendo firmas para que este tipo de cosas no vuelvan a ocurrir... y poco a poco se fueron uniendo más personas, sobre todo madres, que luchan para que nuestros hijos no sean un número más, una estadística de la Dirección General de Tráfico (DGT) y para que las personas en la misma situación sepan que pueden hacer.
P. ¿Cuál es la función principal de Stop Accidentes?
R. Tiene dos objetivos: por un lado, ayudar y orientar a los afectados en accidentes de tráfico, tanto en el plano psicológico como en el jurídico que son las dos grandes áreas que afectan a una persona involucrada en algún siniestro, y por otro lado, la parte reivindicativa ya cuando somos víctimas, conocemos las carencias que hay.
P. ¿Quiénes pueden solicitar vuestra ayuda?
R. Quién la necesite. Por ejemplo cuando hay una muerte, a parte de la víctima física están los que se quedan aquí, que también consideramos víctimas. Les damos una orientación tanto jurídica como psicológica. Sin embargo, de momento no tenemos la posibilidad de ofrecer esta ayuda de forma altruista aunque es nuestro fin. Y si deciden continuar con nosotros, siempre es más económico que otros profesionales.
P. ¿Considera que se están cumpliendo los propósitos que tenían?
R. Sí, de hecho este año hemos realizado el octavo foro de la asociación. En el primero se propusieron una serie de medidas a todas las instituciones y a la DGT para que se pusieran en marcha y la verdad es que nos escucharon. Desde entonces se ha implantado el carnet por puntos, se ha modificado el código penal, las limitaciones de velocidad, los anuncios de televisión no son como eran... Ahora, la concienciación y la seguridad vial son un lenguaje cotidiano que no existía hace unos años. Poco a poco la gente es más consciente de la importancia del uso del cinturón de seguridad o los asientos para niños. Una serie de medidas que nosotros pedimos y vamos modificándolo. Sin embargo, aún queda mucho por hacer, sí; se ha hecho mucho, también. Lo que nosotros pretendemos es salvar vidas.
P. ¿Qué otras actividades realizan?
R. Intentamos concienciar a los jóvenes dando charlas en colegios, institutos, universidades; y a otros sectores de la población, centros de personas mayores... pretendiendo abarcar lo mayor posible; pero somos nosotros quienes tenemos que buscar los lugares, aunque es verdad que cuando decimos quienes somos y nuestros objetivoslo, “enseguida nos abren la puerta”.
P. ¿Cuál cree que es el futuro de la seguridad vial en España?
R. Creo que no podemos nunca desfallecer porque si no nos podría ocurrir lo mismo que a Francia. Ellos consiguieron bajar rápidamente las víctimas y, sin embargo, ahora están otra vez subiendo por una mala gestión: modificación del carnet por puntos, sanciones más suaves... Nosotros queremos hacer llegar a todos que nunca debemos bajar la guardia con la seguridad vial porque aún falta conciencia y queremos que sea una asignatura en las escuelas para que los niños aprendan mientras crecen. Es una apuesta larga pero fiable al cien por cien.
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