Hace dos semanas, Bruselas asumió que Grecia no cumplirá sus metas de déficit, y que por tanto no conseguirá pagar su deuda. Tal declaración nos
lleva a pensar en los finales más controvertidos para el país. Pero, ¿qué
pasará con los países de la UE si Grecia no paga su deuda? Las opiniones de los
expertos acaban por coincidir y todos llegan a la misma conclusión: Grecia será
rescatada poco a poco para que los bancos europeos que compraron su deuda no resulten afectados con este impago.
Profesor Luis Pires/Foto: Jaqueline D'Hipólito |
El profesor del Departamento de Economía Aplicada I de la Universidad Rey
Juan Carlos, Luis Pires, es uno de los que mantiene esta visión optimista:
“Depende de lo que haga la Unión Europea. La Unión Europea lo que va a hacer es salvarla como pueda e intentar que este incumplimiento se haga poco a
poco.”
El también profesor del Departamento de Economía Aplicada I de la misma
universidad, José Luis Montes, mantiene con la misma posición: “Depende de
cuándo deje de pagar”. El profesor explica las consecuencias que el cree que se
pueden dar si Grecia dejase de pagar su deuda en este instante. “El primero es
que ocurra una reacción en cadena de impagos en los bancos. La segunda es que
los problemas pasarían a otros países que entre los cuales podrían estar Italia
o España”.
Sin embargo esto es una especulación que muy probablemente no ocurrirá,
dado que ni Alemania ni Francia tienen interés en que Grecia quiebre. José Luis
Montes explica que muchos bancos europeos tienen deuda griega, en especial
bancos de Francia y de Alemania. El objetivo en financiar Grecia para que no
quiebre no es nada menos que un pago a sus propios bancos. Y completa: “Francia
y Alemania van haciendo rescates paulatinos como forma de dar tiempo a estos
bancos para que doten de reserva suficiente frente al impago griego”.
El profesor Luis Pires reafirma
esta idea: “Ahora lo que la Unión Europea está haciendo es ver cómo va a afectar a
sus bancos, a los bancos que tienen títulos de la deuda griega y lo que hace
ahora es calcular quién va tener que pagar y cuánto”.
Pires también dice que va a haber nuevos planes de recates cada mes y más adelante,
cada tres meses. Pero la Unión seguirá presionando a Grecia para que devuelva
lo que pueda.
Aún con todas estas declaraciones positivas sobre una posible quiebra ordenada
de Grecia, es imposible no pensar qué ocurría si Grecia entra en suspensión de
pagos y que efectos tendrá en la Unión. José Luis Montes explica que el impago
podría crear un efecto dominó a otros países, es decir, que entren en una
quiebra en cadena y otros países, sabiendo que van a ser rescatados, dejen de
pagar sus deudas. Ocurre que las consecuencias serían tan serias que la UE no
dejaría que esto pasara. Según Montes, “la deuda griega es una deuda barata de
mantener. No es lo mismo mantener países mayores y más desarrollados”.
Al igual que José Luis, el profesor Luis Pires también cree que esto no
pasará, pero cita las reformas hechas por estos mismos países como la mayor
respuesta sobre un efecto en cadena. “Grecia es el único país que esta haciéndolo peor. Los otros países están haciendo las reformas necesarias. No están
engañando. Cada país tiene un problema en concreto; Irlanda, Portugal, Italia.
Creo que el problema es realmente Grecia.”
Cuando intentamos rescatar la Historia, el pasado griego no es ni un poco
favorable a su actual situación. Cuando se creó el Mercado Común Europeo,
Grecia mintió sobre su entonces actual situación político-económica para poder formar parte de este mercado. Además, tiene un problema de fraude fiscal enorme.
Sumado a esto, estamos delante de un panorama de desigualdad, en que hay mucha
diferencia entre ricos y pobres. En consecuencia, su economía sumergida es
grande. Y una vez ya dentro del mercado común europeo, lo que Grecia hizo,
según José Luis Montes, fue una mala gestión del dinero europeo en su país.
Todo esto y todo lo que estamos viendo hoy, solo crea precedentes para que no
confiemos más en este país y dejemos de creer que mantenerlo en la UE sería la
mejor situación.
Además, como ya cito el profesor José Luis, una quiebra provocaría un
problema a otros países que están en dificultades como es el caso de
España. Y esta situación si es más
alarmante ya que el profesor afirma que “España sí tiene una posibilidad de
quiebra pero no a corto plazo”.
El profesor explica que España tiene un problema de exceso de administración
pública que extrae recursos financieros, lo que encarece sus costes y por consecuencia hay menos dinero. Añade
que , además, en muchos sectores las empresas del país no son competitivas, lo que impide una mayor
exportación. Y con todo esto, el país emite una deuda que no la puede vender.
Profesor Manuel González/ Foto: Óscar Vázquez |
Si estos problemas se intensifican y la deuda de España sigue siendo rebajada, la situación se complica y los problemas empeoran. El profesor del departamento de Economía Aplicada de la Universidad Santiago de
Compostela, Manuel González López, nos cuenta que el panorama que encontramos
actualmente en España es “en primer lugar, la incapacidad de los mandatarios de
la UE en resolver la crisis del Euro y, en segundo lugar, las medidas de
austeridad excesiva y que contraen la economía”. El profesor también reafirma la posibilidad de
quiebra de España y añade que tal hecho sería un desastre ocasionando “la
ruptura del euro y una depresión que durará años”. Tal hecho también fue hoy (19/10) dicho porla Canciller Alemana, Angela Merkel.
Pero estos son solo especulaciones, que pueden pasar o no. José Luis nos explica algunas medidas que
deben ser tomadas antes que el caos ocurra, como por ejemplo: “aumentar la
eficiencia de la gestión pública y privada. "Respecto a la pública, considerando los niveles centrales y autonómicos, simplificarla y disminuir los gastos hasta quedar con los que son verdaderamente imprecindibles. Las medidas más concretas serían, entre otras muchas, eliminar duplicidades administrativas". El profesor también hace referencia como soluciones reducir el número de los ayuntamientos; reducir el número de coches
oficiales; agrupar las universidades como forma de disminuyer los gastos tanto en
infraestructura como en administración”. Pero, añade José Luis, donde más se puede
hacer ahorros es en la administración pública.
Lo que pasará con España e Italia aun es incierto. Pero lo que esta
ocurriendo con Grecia es cada día más evidente. Tenemos un largo trabajo para
que no pase igual.
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