El
movimiento 15-M ha vuelto a resurgir. El pasado sábado 15 de octubre fue un
gran éxito, según indica en su Web, la organización. Aunque no se atreven a dar
un número exacto de asistentes de la manifestación en Madrid, lo cierto es que
fue la más numerosa de todas las realizadas anteriormente. Ni el propio 15 de
mayo, ni el 19 de junio fueron tan numerosas como la del pasado sábado. Según
los datos incluidos en su página oficial en Internet, en Barcelona asistieron
unas 250.000 personas y en Valencia fueron 100.000, mientras que en Sevilla y
Zaragoza rozaron las decenas de miles de indignados. Por lo tanto, se puede
afirmar que, en cuanto a número de asistentes, la jornada de manifestaciones
por todo el mundo reclamando un “cambio global” fue un rotundo éxito,
exceptuando los incidentes de Roma, que quitaron protagonismo a la enorme
participación. Sin embargo, hay otros aspectos que hicieron del 15-O un gran
espectáculo: la gran puesta en escena de la Puerta del Sol.
Después de iniciar la marcha hacia Sol,
muchos de los indignados se sorprendieron al observar que esta plaza había sido
equipada con todo tipo de tecnologías. Una gran pantalla se colocó en la
fachada del edificio conocido gracias al famoso cartel de “Tío Pepe”, donde se
emitieron diferentes imágenes desde un proyector. Además, una de las salidas
del metro sirvió de ayuda para crear un escenario. Los indignados de Madrid
consiguieron un equipo de sonido digno de un gran espectáculo con altavoces y
micrófonos. “Cada persona que se subía allí arriba se escuchaba en toda la
plaza sin ningún problema” asegura Mario Olmo, participante en la jornada de
protestas.
Incluso algunos coordinadores del evento se sorprendieron
al ver todo lo que se había hecho en la Puerta del Sol. El portavoz de la
comisión de logística, José Sánchez, indica que “gracias a la ayuda de unas
compañeras, se consiguieron la pantalla y todo el quipo de sonido”. También
explica que “fue un duro trabajo de coordinación el hecho de recoger todos los
altavoces, llevarlos hasta Sol y más tarde, montarlos”. La necesidad de un
equipo que produjera electricidad les dio, en un principio, bastantes
problemas, según indica José, pero, finalmente, pudieron solventarlo.
La comisión de logística, encargada de toda la puesta en
escena de la Puerta del Sol, con la ayuda de los encargados de las comisiones
de comunicación y conexión internacional, dividió su trabajo en tres frentes:
imagen, sonido y montaje. Silvia González, encargada y portavoz de esta última,
fue testigo desde lo alto del edificio lo que allí abajo sucedía: “fue algo
inolvidable ver a toda esa gran cantidad de gente en la plaza”. Añade que
“fuimos unas treinta personas, gracias a las obras del edificio, pudimos subir
por los andamios y colocar allí todos los carteles y la pantalla para el
proyector”. Aún así, señala Silvia, “no
fue fácil transportar el material, pues no contábamos con los medios técnicos
necesarios, fue más un trabajo en equipo de todos los allí presentes”.
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| Jóvenes "indignados" en lo alto del edificio en Sol el pasado 15 de octubre. // Sol Portela, Madrid. |
Dentro del significado de esta jornada de protestas por
todo el mundo, puede que no resulte importante esta puesta en escena en la
capital de España. Sin embargo, si se le añade la gran cantidad de asistentes y
el hecho de que no se produjera ninguna incidencia, hacen del 15 de octubre un
espectáculo.
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