Caminar entre basuras

El final del verano ha levantado las alarmas entre los vecinos y grupos políticos del Ayuntamiento de Madrid: la capital está más sucia que nunca, bolsas de basura, excrementos u orines son los protagonistas de algunas de las zonas más emblemáticas de la ciudad

Madrid está asqueroso. Éstas son las palabras de todos los ciudadanos que han denunciado repetidas veces en estos días la deplorable situación de muchas de las calles de Madrid. Bolsas de basura amontadas en torno a los contenedores, orines o excrementos han sido los motivos principales de las fotografías tomadas por muchos de los usuarios de Twitter, acompañadas por el hashtag '#madridestaasqueroso', consiguiendo ser trending topic de la red social durante varias horas.

Tweets de ciudadanos denuncian la situación de suciedad. Foto: Ángela Pérez.

Recortes

En el año 2010 el alcalde de la ciudad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, aplicó un 15% de recorte en los presupuestos del Ayuntamiento destinados a los servicios públicos, afectando a uno de los fundamentales: la limpieza viaria. Todo ello después de haber aplicado la tasa de basuras que pagan los ciudadanos. De esta forma se eliminaría la campaña especial de recogida de la hoja o la recogida de muebles periódica: “Se han cargado la recogida de la hoja, la recogida de muebles periódica porque costaba 400.000 euros, que para el Ayuntamiento de Madrid no es dinero, sin embargo ahora han hecho que los vecinos saquen a la calle cualquier tipo de utensilio y que se quede ahí a dormir el “sueño de los justos” porque luego los camiones de basura no lo recogen si no está en el contenedor”, comenta la concejal y representante en la Comisión de Medio Ambiente de Izquierda Unida (IU) en Madrid, Raquel López. Por otro lado, dos años atrás fue aprobada la Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y Gestión de Residuos, multando a los ciudadanos con 750 euros si se dejaba cualquier residuo fuera del contenedor e incluso si no se separaban las basuras en origen. López denuncia que sin embargo ahora no se da la posibilidad al ciudadano de mantener sus calles limpias: “El ciudadano no puede meter una bolsa de basura en un contenedor de materia orgánica si resulta que el contenedor ya está lleno porque no se limpia o no se retira como se retiraba antes”.

La concejal y representante en la Comisión de Medio Ambiente de IU en Madrid, Raquel López. Foto: Ángela Pérez. 

El paso del verano ha tenido grandes efectos negativos para la situación, ya que los trabajadores que se han ido de vacaciones no han tenido ninguna clase de sustituto, por lo que la plantilla de los servicios de limpieza se ha reducido en mil personas desde junio de este año, lo que supone un 33% del total. Raquel López denuncia la gestión de la delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, quien, según la de IU, afirma que no existe tanta necesidad de limpieza en verano en las calles de Madrid porque los vecinos se van fuera de vacaciones. “Es un absurdo, porque resulta que por la crisis la gente no se va de vacaciones, la gente se queda en Madrid y más en unos barrios en donde la tasa de paro es brutal”, afirma la concejal.

Unos más que otros

La suciedad se concentra estos días en zonas determinadas de Madrid, destacando unos barrios sobre otros. “En el distrito Centro la parte de Marqués de la Ensenada del barrio de Justicia no tiene que ver con la parte de Chueca, nada, en materia de limpieza. Las calles que son amplias e importantes, las limpian, no todo lo a menudo que sería necesario, porque ahora con lo de la recogida de la hoja en plena calle Sagasta está llena de hojas de árboles y todo, pero desde luego bastante más que otras zonas, que las zonas que considera el Ayuntamiento que son secundarias”, comenta la concejal y representante en la Comisión de Medio Ambiente del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Madrid, María Luisa de Ybarra. 

La concejal y representante en la Comisión de Medio Ambiente del PSOE en Madrid, María Luisa de Ybarra. Foto: Ángela Pérez.  

Lavapiés parece ser uno de los barrios más afectados del distrito Centro por la situación, donde se acumulan las basuras en las calles menos principales. “Hace poco estuvimos en Lavapiés viendo cómo estaba, que no es el único barrio que está tan sucio y mandaron cuatro coches de limpieza en el momento en el que estábamos nosotros ahí porque había rueda de prensa, sin embargo las calles de alrededor seguían igual, con las basuras tiradas, los orines o los colchones tirados por la calle”, asegura De Ybarra, y añade que la trasera de Gran Vía o la plaza de la Cebada son también otras zonas a destacar por su ausencia de limpieza. La concejal de IU también afirma que la limpieza cambia radicalmente según el barrio madrileño en el que nos encontremos, y denuncia que tengan preferencia las zonas con mayor nivel adquisitivo: “Si no hay dinero, que se recorte de otra parte, pero no de servicios públicos, pero que si no hay dinero para ello, tampoco hay dinero para la limpieza en Serrano. Porque allí se puede comer en el suelo. Sin embargo Pan Bendito, Centro, Usera, Villaverde o San Blas, están absolutamente asquerosos, y esa es la palabra: asquerosos”. 




Esta situación se repite si se habla de zonas con mayor o menor tránsito turístico. “Hay un especial objetivo de este gobierno de limpiar las partes que son vistas por el turismo. El año pasado denunciamos que en la Plaza Mayor por la noche había muchas personas sin hogar que se ponían a dormir allí y resulta que el servicio de limpieza iba y con las mangueras les echaban antes de que amaneciese para que entonces el turista no lo viese. Y esto lo ordenaba el Ayuntamiento de Madrid, es como la política de la alfombra, meterlo todo por debajo que no se vea. Entonces, están impolutas las partes turísticas. Ahora, si nos ponemos a callejear un poco ya es otra historia. Y es por allí por donde viven los madrileños. Pero esas zonas de turismo se cuidan mucho de tenerlas en magníficas condiciones”, denuncia López. 

Remunicipalización

De Ybarra afirma que la ausencia de limpieza en las calles de Madrid podría llegar a afectar a la salud de los ciudadanos, por lo que no se queda únicamente en una cuestión de estética para los vecinos y los turistas: “El recorte en la limpieza provoca malos olores, roedores, plagas de todo tipo y que pueden llegar a afectar a la salud de los vecinos y vecinas de Madrid”. López considera que lo que no puede hacerse es llevar a cabo recortes en unos servicios tan esenciales como son la limpieza viaria o la recogida de basuras y muebles y pide la remunicipalización del servicio: “Nosotros exigimos no solo que no se recorte, sino que se remunicipalice el servicio, que los trabajadores dependan del Ayuntamiento de Madrid mediante personal laboral y que sea directamente el Ayuntamiento quien gestione un servicio que es de primera necesidad. Las empresas se llevan muchísimo dinero, cientos de millones de euros. El 80% de presupuesto municipal de medioambiente se va a pagar a estas empresas, estamos hablando de trabajadores que cobran entre 900 ó 1.000 euros, es decir que se queda mucho por el camino”. María Luisa de Ybarra está de acuerdo con su homóloga en IU y exige una mayor inspección en las empresas que se encargan de la limpieza de la ciudad: “No a los recortes en materia de limpieza”, afirma con rotundidad.  

Situación de las basuras en la calle de Argumosa, en el barrio Lavapiés de Madrid. Fotos: Ángela Pérez.

Aquellos que se enfrentan a diario a la retirada de las basuras, los operarios de limpieza, son los que reciben las quejas de primera mano por parte de los vecinos. El responsable de Comisiones Obreras del Saneamiento Urbano en la Comunidad de Madrid, Félix Carrión Jimeno, comenta que ellos reciben muchas reclamaciones pero que la peor parte se la llevan los que están a pie de calle: "Recibimos muchas quejas pero son sobre todo los trabajadores en la calle los que se ven afectados por ellas, el vecino es exigente y la realidad es que al que ven siempre es al compañero de verde". 


Raquel López asegura que el Gobierno del Ayuntamiento de Madrid está utilizando la crisis como excusa para permitir que la suciedad se apodere de las calles madrileñas y lo compara con la actual situación de la educación en la Comunidad de Madrid: “La crisis está sirviendo de excusa para todo. Para recortar derechos a los trabajadores, derechos en cuanto al acceso a los servicios públicos, estamos viendo el problema de la educación. Es decir que al final es un mini-ejemplo de la brutalidad que se está cometiendo con los derechos de todos y todas las ciudadanas. Ahora es la basura, pero mañana cuando gobierne el Partido Popular en el país serán un millón de cosas más. En Madrid, lo primero que hizo Gallardón con lo de los recortes fue aplicarlo a los servicios públicos”. Este tipo de ahorro afecta especialmente a los ciudadanos, y más aún cuando están pagando por esos servicios. La higiene y la salud de los vecinos, además de una cuestión estética son las grandes víctimas de esta situación.

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