En
época de crisis los recortes se suceden con frecuencia. Uno de los
que más da que hablar y dará que hablar en los próximos tiempos es
el que afecta a la rama sanitaria. Aparece un nuevo concepto:el
copago. Se vuelve a activar una polémica abierta desde 1991, fecha
en la que se aprobó un escrito conocido como Informe Abril, escrito
que propugnaba dicho concepto. En el aparecía la obligatoriedad de
concienciar en el gasto, tanto a los usuarios como a los
profesionales, facturando todos los actos de asistencia médica
aunque fueran cubiertos por una ayuda pública, parcial o total.
Uno
de los médicos de Urgencias del Suap de García Noblejas, Juan
Carlos Quesada Rubio
afirma
:”Yo
creo que el copago es la consecuencia de varias circunstancias:los
avances médicos y sus altos costes,la cantidad de medicación que se
prescribe y los altos precios de las mismas,la escasa tolerancia a
la enfermedad y el dolor de una sociedad hedonista y la famosa
crisis.”
La
palabra copago, la cual ni siquiera se encuentra en el diccionario de
la Real Academia, es utilizada para aquellas situaciones en las que
las personas deben abonar una cantidad de dinero a cambio de un
servicio sanitario. Esta medida se lleva a cabo en diferentes países
de Europa con modelos y cuantías variables. El problema surge
cuando la población ya ha pagado su derecho a una sanidad pública
gratuita a través de sus impuestos.
En
la comunidad de Madrid, el gobierno de Esperanza Aguirre ya ha
declarado su intención de entregar facturas representativas a los
pacientes, según sus palabras, con el fin de concienciar del gasto.
“El recibo tendría un efecto de concienciación a largo plazo. Al tiempo que firmas facturas y lees los trabajos realizados, te vas haciendo cargo de lo que cuestan los servicios. Un método más demoledor es el de hacer pagar por los servicios recibidos y cobrarlos después en ventanilla. Este modelo se usa en algunos países. Mejor no dar ideas”, afirmaba Juan Carlos Quesada Rubio.
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), lucha por los derechos de los pacientes ante tales
circunstancias. La responsable de prensa de la Federación,Encarnación
Ruiz, afirma:”Las
CCAA no tienen competencias para instaurar copagos en sanidad dentro
de las prestaciones cubiertas por el catalogo de prestaciones del
Sistema Nacional de Salud. Existe un informe interno de la comunidad
que propugna poner copagos en algunas prestaciones, la comunidad
niega que vaya a hacerlo. En todo caso parece lógico pensar que no
se hará nada hasta el 20N y luego si el resultado es el que parece
existen bastantes probabilidades de que el nuevo gobierno del PP
intente ponerlo en marcha”.
En
cuanto a la entrega de facturas representativas Encarnación Ruiz
opina: “Creemos que tiene poca eficacia y bastantes costes, la
ciudadanía ya sabe que el coste de la sanidad sale de sus impuestos,
más bien, en la linea de lo señalado anteriormente se trata de una
medida que intenta amedrentar a la población y convencerla de que la
sanidad es muy cara y no puede mantenerse”.
Ahora
sólo queda esperar a las elecciones del próximo 20 de noviembre y
ver las medidas ,que un partido u otro, llevará a cabo en este
aspecto.
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