ENTREVISTA: Cayo Lara, coordinador general de Izquiera Unida
Después de lograr once escaños en las elecciones
generales, Izquierda Unida promoverá una
reforma de la Ley de la Memoria Histórica. El coordinador general de IU, Cayo
Lara, considera que la actual ley “se
queda muy corta” y que corresponde al Estado, y no a las asociaciones memorialistas,
“tener las riendas” en todas las actividades relacionadas con la recuperación
de la Memoria Histórica puesto que, “se trata de una cuestión de voluntad
política y de responsabilidad”. Cayo Lara
fue uno de los impulsores del sindicato COAG y además, miembro veterano del
PCE. En 2008, pasó a ser el cuarto dirigente
de IU tras suceder a Gaspar Llamazares.
Cayo Lara. Foto: Clara Hilario |
Pregunta. ¿Cuál cree que va a ser el
futuro de la Memoria Histórica tras unas elecciones en las que el PartidoPopular ha obtenido mayoría?
Respuesta. Pues seguramente poco halagüeño. No se producirán grandes avances en materia de
Memoria Histórica. El PP se opuso a la creación y desarrollo de la Ley de la Memoria Histórica con la excusa de que
no había que abrir heridas y que teníamos que mirar al futuro. Parece que se
sienten lastrados por su pasado y por tener un presidente fundador que fue
ministro franquista. Tal vez, por eso no quieran que una ley de de este tipo
pueda traer la justicia y la dignidad que se merecen los españoles represaliados
por el fascismo durante la Guerra Civil y durante la dictadura.
P. Gaspar Llamazares, hace tres
semanas anunciaba en un homenaje a las víctimas del franquismo que su partido
iba a promover una reforma de la Ley de la Memoria Histórica. ¿Cuáles serían
los contenidos de esa reforma?
R. Principalmente,
la anulación de todas las sentencias del franquismo y que se hiciera un juicio justo por sus crímenes. Hay una
razón esencial que argumenta esta línea de actuación, y es que la democracia en
España no podrá ser plena hasta que no se reconozca ese negro pasado de su
historia y que se otorgue el homenaje
que se merecen los hombres y mujeres que se enfrentaron a él. No se trata de
abrir heridas, como algunos manifiestan, sino de cerrarlas. Pediríamos que
fuera el Estado, y no las familias, quien investigara, señalizara y exhumara todas
las fosas comunes. Por otro lado, también incluiría la garantía de protección de lugares
históricos, construcciones, archivos y vestigios. Creemos que también
constituye obligación, por parte del Estado, elaborar una completa base de
datos con los nombres de las víctimas y sus familiares, así como la relación de
bienes de todo tipo incautados por la dictadura franquista.
presidente fundador que fue ministro
franquista”
P. Llamazares también hablaba sobre la posible
incorporación en los últimos cursos de Educación Secundaria y Bachillerato de una
materia bajo el epígrafe “Memoria Histórica democrática”. Hábleme sobre esto.
R. Entendemos que es un derecho de la sociedad española tener un relato
democrático de la lucha por la República y contra el franquismo. Por ello, demandamos que en los colegios se produzca una
crónica republicana y democrática de la historia de los guerrilleros
antifranquistas para que sus nietos recuperen la Memoria y sigan profundizando
en su conocimiento.
P. ¿De verdad
cree usted que esa reforma se va a producir
siendo Mariano Rajoy el presidente del Gobierno?
R. Tengo serias dudas,
por no decir que tengo una total
certeza de que no. El PP no quiere que
se haga justicia ni reparación. Pero, nosotros les haremos saber que la reforma
es necesaria porque la actual ley se quedó muy corta y pecó de poco ambiciosa.
P. Hace
unos años, continuamente se hablaba de fosas comunes y exhumaciones. Hoy,
apenas forman parte del debate público.
¿Qué opina de esto?
R. La crisis económica que nos
afecta y las políticas conservadoras desarrolladas por el Gobierno socialista
ha provocado que el tema de la Memoria Histórica haya sido relegado a un
segundo o tercer plano. Esto no debería de ser así, no puede haber ninguna excusa para no
acometer la imprescindible tarea de devolver la dignidad y la justicia a los
represaliados y a sus familias.
Estoy seguro de que
el Estado tiene los recursos suficientes para llevar a cabo estos trabajos. Es
una cuestión de voluntad política y de responsabilidad. No hay que olvidar que
estamos hablando de miles de ciudadanos y ciudadanas de nuestro país que
continúan desaparecidos. No puede tratarse de una tarea que se siga encomendando a las asociaciones y
familiares que tanto esfuerzo y dinero están depositando en esos trabajos de
exhumación de las fosas. El Estado es el que debe tomar las riendas y ser el
primero en este empeño.
P. ¿Por qué su partido promueve una reforma de la
ley, cuando los representantes de asociaciones
que luchan por la Memoria Histórica piden que se suprima y que se aplique
directamente el Derecho Internacional?
R. Estamos hablando de españoles
que han sido asesinados, desaparecidos y represaliados por una dictadura en
nuestro propio país. El Estado tiene que tener un papel fundamental que, por
supuesto, no sustituye el trabajo que se
hace desde las asociaciones. Pero, sí debe colaborar activamente y dotar de
recursos suficientes este importante capítulo. Para esto, es recomendable que exista algún tipo de ley
que regule todo lo relacionado con la dotación de recursos, ejecución de los
trabajos, protocolos como los ya existentes…
Pero, por supuesto que
sí coincidimos con las asociaciones en que la actual ley es claramente insuficiente y
se queda muy corta con respecto a lo que sería necesario hacer en nuestro país.
P. ¿Cree usted que el franquismo se
va a sentar algún día en el banquillo? ¿De qué forma podría?
R. No lo sé. Lo que sí espero es
que un día, más pronto que tarde, se haga justicia con las víctimas de la
represión. Esas víctimas y sus familiares, todos nosotros y la historia de España,
se merecen que eso ocurra y que haya dignidad, verdad y reparación de una vez
para que, ahora sí, se puedan cerrar esas heridas que abrió el fascismo este
país.
Para ello, las
investigaciones históricas que, a día de hoy, siguen arrojando luz sobre
nuestro pasado, y la acción de la Justicia son fundamentales para que el
franquismo pueda sentarse de algún modo en ese banquillo de la historia y de
los juzgados.
“El PP no quiere que se haga justicia ni reparación”
P.
El Valle de los Caídos ha sido un tema polémico durante las elecciones
generales. ¿Qué opina de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM)
haya permitido a los falangistas realizar una marcha durante la jornada de
reflexión?
R.
Me parece una
decisión equivocada. No por el hecho de que esto se produzca en el día de
reflexión, que también, sino porque creemos que este tipo de manifestaciones de
enaltecimiento del fascismo y de sus representantes no pueden tener cabida en
una democracia. Enaltecer y ensalzar la figura de prohombres del fascismo y de
la dictadura franquista no pueden tolerarse en un país democrático.
P. ¿Qué piensa respecto a que el
Tribunal Supremo haya adelantado el juicio de las escuchas del Caso Gürtel al juez Garzón, teniendo en
cuenta, que la investigación para el juicio de la Memoria Histórica está lista
desde hace más de un año?
R. En España la justicia y los
responsables de su aplicación siguen teniendo un carácter conservador. Lo que
se ha hecho con Garzón al hilo de sus investigaciones sobre el franquismo es
totalmente injusto y desde mi partido siempre nos hemos posicionado favor de
Garzón. ¿Cómo es posible que se intente culpar o penar a alguien por el hecho
de investigar los crímenes de una dictadura? Esto parece el mundo al revés.
“…demandamos que en los colegios se produzca una
crónica republicana y democrática de la historia de los guerrilleros
antifranquistas”
P. ¿Se cerrarán algún día las heridas o nunca se va a dar esa
reconciliación en España?
R. Ojalá pudieran cerrarse porque la gente no ha podido
enterrar a sus familiares y honrarlos como se merecen. Seguramente, cuando esto ocurra, podremos
pasar página en ese sentido. Pero, jamás podremos y debemos olvidar la historia
de nuestro país. Las actuales generaciones y las futuras tienen el derecho y la
obligación de saber lo que ocurrió aquí durante esos cuarenta años de nuestra
historia, un período negro que hay que seguir descubriendo. Se lo debemos a
todos aquellos que dieron su vida por la libertad, la democracia y la justicia
en España.
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