Los artistas indies responden con
curiosas iniciativas a la industria musical, que intenta incentivar las ventas
a golpe de vinilos, ediciones especiales y descargas gratuitas
Fuenlabrada, 30 de noviembre de 2011.- Es un hecho que
la esfera independiente no puede competir frente al poder de las discográficas
a nivel económico. Sin embargo, lejos de que el escaso presupuesto sea una
limitación, los artistas han sabido encontrar originales maneras de ganarse a
su público no solo a través de la música. Y es que hace mucho más un buen
pincho de tortilla que un par de canciones extra, o eso debió pensar AnaFernández-Villaverde, más conocida como La Bien Querida, que regresa a Madrid
el próximo 22 de diciembre en la gira de su segundo trabajo, ‘Fiesta’.
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| Vega firmando piruletas/FOTO: VEGA CIRCULANDO |
En repetidas ocasiones, la cantante bilbaína ha confesado que sus dotes en
la cocina se limitan a la tortilla de patata y que algunas veces la lleva hecha
para las giras, hasta ahí, nada fuera de lo común. Aunque, lo que seguramente
no se esperaban sus fans era encontrar junto a chapas, camisetas o chanclas con
la cara de la artista pinchos de tortilla hecha por ella misma a un euro.
Pero, por original que pueda parecer la idea, La Bien
Querida no es la primera artista que sorprende a sus seguidores con iniciativas
un tanto llamativas. Nadie imaginaría que Vega comenzó repartiendo piruletas en
la sala Búho Real. La misma artista que ha llegado a ser en la primera semana
número seis en la lista Promusicae de los discos más vendidos con su último
trabajo, ‘La cuenta atrás’.
La cantautora cordobesa decidió hacer un guiño a sus fans en la gira de
presentación de ‘Cómo girar sin dar la vuelta’ repartiendo piruletas con su
autógrafo entre los asistentes al concierto. Un detalle que, sin duda, le ha
servido para ganarse a un público fiel. El mismo que ha conseguido que, tras
años de duro trabajo, la carrera de la artista por fin se haya hecho notar en
el panorama musical nacional.
«En todos estos años quien más me ha sorprendido ha sido Zahara porque
siempre trae algo para repartir entre el público. Cuando no son sugus, son
lacasitos pero siempre viene con algo con lo que sorprender», confiesa el dueño
de la sala Búho Real, Darío Fernández. Y es que la jienense siempre ha sido una
verdadera especialista en sacar sonrisas, a pesar de que sus canciones tiendan
a tener un sabor algo amargo.
Con la salida de su primer álbum, “La fabulosa historia de…”, la emoción
fue tal que la artista anunció en MySpace que el mismo día de la puesta en
venta estaría a las puertas de la Fnac de triangle de Barcelona. A las diez de
la mañana, la jienense no estaba allí solo dispuesta a comprar su disco sino
que además llevó churros como desayuno para sus fans. Sugus, lacasitos,
piruletas y todo tipo de gominolas han acompañado a la artista desde entonces en
sus actuaciones.
«Es muy divertido ver su cara porque no se lo esperan y ves como a la gente
le hace ilusión. Lo mejor es cuando vas por la calle y te encuentras con algún
fan y te pregunta que con qué vas a sorprenderles el próximo día», dice la
cantante jienense.
Mientras, las ediciones especiales y las descargas gratuitas en iTunes continúan
siendo las principales bazas de la industria musical para salir de una crisis
que ya dura años. Esta temporada, el vinilo se presenta como la última
estrategia de las discográficas para llamar la atención del público e
incrementar el número de ventas. Ese disco de gran tamaño que desapareció en
1983 con la llegada del CD y que hace un par de años volvió a resurgir de la
mano de los sellos independientes.
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