Las luchas internas entre los socios de gobierno y la
oposición pueden poner en peligro la aprobación del presupuesto municipal
La mala situación de las
haciendas locales se ve agravada por la actual situación de crisis que
atraviesa toda Europa y que obligará a efectuar serios recortes. La
multiplicidad y superposición de administraciones no ayuda a clarificar la
responsabilidad que cada uno debe asumir, sobre todo en lo que respecta a la
prestación de los servicios. El nivel de endeudamiento permitido y la pérdida de subvenciones por parte de otras administraciones, está obligando a los ayuntamientos a hacer malabarismos con los números. De ahí, que la elaboración de los presupuestos y
con ellos la previsión de los futuros gastos,
juegue, en este momento, un papel fundamental.
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| El Ayuntamiento de Lugo / MJ Campo |
El Ayuntamiento
de Lugo, gobernado por una coalición entre el PSOE y el BNG, el primero con
11 concejales y el segundo con dos, debería aprobar su presupuesto a finales de
año. Sin embargo, el portavoz del grupo municipal del Partido Popular que
cuenta con 12 concejales, Jaime Castiñeira, asegura que no habrá presupuesto
para el próximo año, al menos, “hasta el mes de febrero, porque los conflictos
y discrepancias internas entre los miembros del bipartito están retrasando la
presentación de las cuentas municipales”.
La situación de desacuerdo entre
el grupo socialista y el nacionalista, que ahora gobiernan en coalición, no es
una novedad para esta ciudad. En la legislatura del 1999- 2003 ambos partidos
compartieron labores de gobierno que terminaron como el “rosario de la aurora”.
De tal forma que en las siguientes legislaturas el PSOE, sin mayoría absoluta,
se vio obligado a suscribir apoyos puntuales para poder gobernar en solitario.
Desde el grupo municipal socialista,
en palabras de su portavoz Luis Álvarez, aseguran que las acusaciones vertidas
por la oposición sobre esas posibles divergencias no son ciertas. “No existe
absolutamente ningún problema entre los socios de gobierno para la elaboración
de los presupuestos. La tarea de elaboración de los presupuestos es compleja, y
las estaos desarrollando en colaboración y cooperación”.
Los populares, sin embargo,
insisten en las discrepancias y además añaden: “no solo se producen entre los
dos grupos en el poder, sino también entre los propios concejales del grupo
socialista”. Algo que el portavoz del PSOE negó rotundamente: “no existen los
citados problemas, más allá de las tensiones legítimas que se puedan originar
entre los miembros de un mismo grupo para contar con más capacidad inversora
dentro de la concejalía que cada uno gestiona”.
Por su parte, la edil del BNG,
Paz Abraira, comentó que ambos socios de gobierno están trabajando para
presentar un presupuesto “adaptado a la realidad social y económica que tiene
el Ayuntamiento de Lugo”. Y en contestación a las manifestaciones de la
oposición sobre las posibles desavenencias ente socios, manifestó “es curioso
que el señor Castiñeira hable ahora de discrepancias dentro del grupo de gobierno,
pero no diga nada sobre los anuncios de la Xunta de hacer recortes que van a afectar
directamente a los Ayuntamientos y que nos están obligando a mirar con lupa
todas las actuaciones que vamos a hacer”.
La situación tirante que vive
este municipio dese hace tiempo entre el gobierno y la oposición encuentra en
el tema presupuestario un nuevo frente que no tiene perspectivas de solución a
corto plazo.
La elaboración del presupuesto se
realiza por el grupo en el poder, y debe ser aprobado definitivamente por el
pleno municipal, con una mayoría simple, antes del 31 de diciembre del año
anterior al ejercicio en que deba aplicarse.
En este sentido, el portavoz del
PP, Jaime Castiñeira, recordó que lo habitual es que la “aprobación – inicial-
de los presupuestos se haga en noviembre, o en la primera quincena de
diciembre”, pero sin embargo, a estas alturas “todavía no se ha celebrado ni
una sola reunión, ni se nos ha entregado ninguna documentación que nos permita
comenzara trabajar en nuestras propuestas”.
Insiste el PP, en recordar que el
pleno ordinario del mes de diciembre se celebrará el lunes día 12, pero en
orden del día enviado a los concejales no aparece la aprobación de los
presupuestos del próximo año. “La tardanza en la elaboración del presupuesto es
injustificable”, dijo el portavoz del grupo popular. Y contrapuso la actuación
del gobierno municipal de Lugo con la de la Xunta de Galicia, que presentó su presupuesto “en
el mes de octubre y lo aprobará antes de finalizar el año”.
Las acusaciones del PP no parecen
ser bien recibidas por el PSOE que según su portavoz, Luis Álvarez, “ya sabían
desde el 30 de noviembre que la aprobación de los presupuestos no iba a ir al
pleno ordinario de diciembre, sino que se iban a tratar en la sesión ordinaria
de enero que, con motivo de las fiestas navideñas se adelanta al 28 de
diciembre”.
El presupuesto municipal
constituye un acto de previsión, de planificación económica. De su elaboración
y posterior aprobación se derivan importantes consecuencias para el propio
municipio, como son la realización de obras, la contratación y prestación de
servicios o la realización de actividades. Entre unos y otros, gobierno y
oposición, no parece que por el momento exista algún acuerdo. No se sabe si por
la propia escenografía de ficticio desacuerdo que se empeñan en representar o
porque realmente hay fundamento para desconfiar de la situación interna del gobierno
municipal.
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