Álvaro Minguito (Madrid, 1972) es un fotoperiodista que colabora con el periódico Diagonal, entre otros. Comprometido con el reportaje social, este fotógrafo autodidacta lleva años trabajando en proyectos alrededor de todo el mundo, como en Palestina o África. El pasado noviembre sacó un libro junto a Roberto Blanco Tomás ("¿Qué pasa? Que aún no tenemos casa").
Pregunta.- ¿Cómo empezó su afición a la fotografía?
Respuesta.- Soy fotógrafo freelance, aficionado
desde que era pequeño, ya que en mi familia había fotógrafos y
laboratorio de B/N, pero mi modo de abordar la fotografía es más
autodidacta que otra cosa.
P.- ¿Cómo y cuándo empezó a publicar sus fotos en medios de comunicación?
R.- Aunque es cierto que he colaborado y
colaboro en algún periódico y revista, y he publicado en varios
dentro y fuera de España, incluyendo un pequeño libro de reciente aparición, lo cierto es que mi forma de ganarme la vida durante
muchos años no ha tenido nada que ver con la fotografía. Quizá afortunadamente, ya que ésto me ha permitido hacer lo que he querido
sin depender de si vendía o no.
P.- ¿Cómo es un día de trabajo 'normal'?
R.- En la actualidad colaboro con un
periódico y planeo mi tiempo en función de los temas que me
interesan. En este sentido, durante los últimos años, y en realidad
desde antes de manera más informal, he colaborado en diversos medios
de lo que se han denominado "contrainformación" o
"información alternativa". Estos medios han experimentado
un gran auge en los últimos cinco años, sobre todo a raíz de la
popularización de internet y blogs. Así que creo que son
instrumentos necesarios ya que nos permiten acceder a información no
manipulada o comprada por las grandes compañias.
P.- ¿Cuáles son los temas que más le
motivan para cubrir en España? ¿Por qué?
R.- Uno de los proyectos en el que llevo
casi dos años es el de la documentación de exhumaciones de fosas de
la guerra civil. Entonces en función de dónde son y del tiempo que
llevan me voy planificando. Intento abordar el tema desde el máximo
respeto, y con rigor; no se trata de fotografiar huesos, sino de
documentar el esforzado trabajo de voluntarios que intentan que este
trágico episodio de nuestra historia no quede permanentemente
sepultado.
P.- Tiene varios trabajos hechos en por
todo el mundo, ¿por qué elige esos lugares y esos temas?
R.- Los temas de mis reportajes tienen
bastante que ver con mis inquietudes sociales; temas como la
ocupación rural, el derecho a la vivienda digna, las mujeres en África, o el conflicto en Palestina son temas en los que trabajo no
solo con la cámara.
P.- ¿Qué intenta transmitir con sus
fotos? ¿Cuál es el principal objetivo con los reportajes
fotográficos que hace?
R.- Lo que
yo pretendo con la fotografía es contarle a la gente en imágenes mi
modo de ver las cosas, sobre todo aquellas que no están en los medios
de comunicación oficiales. Mi objetivo es, la mayoría de las veces,
denunciar situaciones injustas, olvidadas o silenciadas. También
reservo, claro, una parte de mi afición a temas más personales,
digamos poéticos, íntimos o sensitivos.
P.- Hoy en día, con la ayuda de las redes
sociales como Twitter o Facebook, cualquier persona puede ejercer
como periodista, tanto para informar como para tomar una imagen,
colgarla en la web y suplir el papel del fotoperiodista. ¿Cómo ve el papel del fotoperiodista en la actualidad?
R.- No creo sin embargo que esto signifique
el fin del periodismo o del fotoperiodismo, tienen que seguir
existiendo profesionales en estos campos que aporten rigor a la
información. De hecho en la actualidad es algo demandado por la
sociedad, y difícil de encontrar desgraciadamente.
P.- ¿Qué piensa sobre la manipulación en
las fotografía de prensa? ¿Cuál es el límite?
R.- No creo que haya cabida en la
fotografía de prensa para la manipulación de las imágenes. Si en
la publicidad o en reportajes más o menos estéticos, pero nada mas.
La imagen tiene que representar exactamente lo que ocurría en el
momento del disparo. Ahí es donde entra, en mi opinión, la labor
del buen fotógrafo, que es el que sabe contar y desarrollar
historias con sus fotografías.
P.- ¿Qué proyectos tiene en mente?
R.- Seguir disfrutando con la fotografía,
seguir creciendo como fotógrafo, seguir luchando para que en esta
sociedad nadie pueda ser silenciado por denunciar situaciones
injustas, y aportar mi pequeño granito de arena para que en un
futuro próximo un cambio social sea posible.
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