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El proyecto de presupuestos de Extremadura para 2012 salva a su Orquesta


El proyecto de presupuestos para 2012 que se está debatiendo en el Parlamento extremeño, incluye, según informa la responsable de prensa de la Consejería de Educación y Cultura, Elena de Prado (ha sido imposible contactar con la consejera, Trinidad Nogales), una partida para la Orquesta de Extremadura de igual cuantía que la que se le asignaba en los del año anterior. Esta noticia, pendiente aún de la aprobación de los presupuestos, vendría a cerrar una larga crisis que desde hace meses ha puesto en duda la continuidad de la agrupación. 

Orquesta de Extremadura. Foto: Fundación Orquesta


                  


A pesar de ello, los miembros de la orquesta no han recibido por el momento  ninguna comunicación oficial sobre el futuro de la misma, como certifica uno de los miembros del comité de empresa, Ambrosio Castillo Roda, violinista de la agrupación, limitándose la información de la que disponen a la que va apareciendo en los medios de comunicación. Según explica Castillo, temen que el ‘olvido’ en el apartado de Educación y Cultura de los presupuestos, de los 22 millones necesarios para pagar a los profesores y al personal de administración y servicios de la Universidad deExtremadura, que hace necesaria la modificación de los mismos, pueda afectar negativamente a la partida de la orquesta, una posibilidad que niega la señora de Prado.
  
El director titular, Jesús Amigo
Foto: Guillermo Mendo 

Mientras no se confirma esta dotación, según comunica Diego Pérez que desempeña tareas de prensa, comunicación visual y corporativa en la Fundación Orquesta de Extremadura y habla en nombre de la misma ante la ausencia del gerente, que fue destituido por la consejera (después de haber rechazado su dimisión) sin nombrar sustituto: “sólo existe programación aprobada hasta diciembre; a partir de enero está todo por decidir y serán las instancias que tienen que tomar decisiones las que dispongan”. Una situación preocupante que los músicos recogen en el Manifiesto con el que llevan varios meses recogiendo firmas en apoyo de la agrupación: “el futuro de la Orquesta de Extremadura es incierto. Somos la única orquesta sinfónica española que no tiene temporada de abono para 2012”. Ambrosio Castillo añade: “aún en el mejor de los casos, si la orquesta no desaparece, nos enfrentamos a las dificultades de hacer una programación y de contratar solistas y directores sin la debida antelación”. Diego Pérez opina, sin embargo que, mientras no se aclare definitivamente el futuro de la formación, la situación debe ser de cautela porque “peor sería comprometer una programación que luego no se pudiera cumplir”.
                      

La Orquesta fue creada por la Junta de Extremadura en el año 2000. Hasta ahora había funcionado con un ciclo de abono en Badajoz, Cáceres, Mérida y Plasencia, llevando a cabo recitales en otras localidades extremeñas, conciertos didácticos para escolares de toda la región y ejerciendo una importante labor docente en la formación de nuevos músicos a través de la Orquesta Joven de Extremadura. Tras las elecciones autonómicas, las polémicas declaraciones del nuevo consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad, Antonio Fernández, afirmando, entre otras cosas, que la orquesta era un artículo de lujo, prescindible, de nulo interés social, cuya desaparición permitiría crear 150 puestos de trabajo, obviando, como ya entonces señalaba el comité de empresa, los puestos directos e indirectos que se destruirían eliminando la agrupación y cerrando el paso a la posibilidad de trabajar en su tierra “que una formación de este tipo ofrece a los extremeños que han optado por hacer de la música el mundo profesional en el que desarrollarse”; así como las respuestas vagas de la consejera de Educación y Cultura sobre la falta de previsiones para la siguiente temporada (se limitaba a señalar que se estaba trabajando en la búsqueda de un modelo más viable), pusieron en duda la continuidad de la formación más allá de 2011.
                        

A la campaña de recogida de firmas de los integrantes de la orquesta se sumaron numerosas voces de la cultura extremeña y nacional. Entre ellas, la de la Directora de la Escuela Superior de Música Reina Sofía, Paloma O’Shea, que envió una carta abierta a 19 periódicos españoles en defensa de la orquesta, con el título ‘Las orquestas no, por favor’, de la cual, por su interés y tras consultar con su gabinete de prensa, reproducimos algunos fragmentos: “sería un grave error desmantelar activos culturales como orquestas, teatros o festivales, porque el tiempo y el dinero que requeriría su reconstrucción posterior es inmenso en comparación con el ahorro que pueda producir hoy su cierre”.

La orquesta saludando. Foto: Guillermo Mendo

“Con diez años de vida, la OEX es una de las más jóvenes de España, pero está ya plenamente consolidada y su labor ha representado un gran avance en la vida cultural extremeña. Su supervivencia es muy importante, y no solo para Extremadura, sino para toda España, que desde hace ya unas cuantas décadas tiene depositada en el progreso de su vida musical buena parte de su ilusión como país, e incluso de su dignidad como nación moderna, liberada de sus complejos históricos”.

“…la cultura musical se está produciendo por fin en casa. Se incuba en nuestros conservatorios elementales, que se han multiplicado asombrosamente en número, se termina de madurar en los superiores, que tanto han progresado, y en centros de alta especialización […] Y, una vez madurada, se expresa principalmente en la labor de nuestras veintitantas […] orquestas sinfónicas […]. Cerrar un foco de creación cultural, como es la Orquesta de Extremadura, es echar a la basura el trabajo, la ilusión y el dinero de varias generaciones y significaría empezar a rendirse y a admitir el fracaso social”.

                            
                       
La compositora Zulema de la Cruz, cuyas obras han sido interpretadas por la agrupación, manifestaba hace unas semanas que la tardanza en dar respuestas sobre el futuro de la misma hacía pensar que, como está ocurriendo con algunos prestigiosos certámenes en otros lugares de España, la Consejería, en vez de tomar la decisión, claramente impopular, de acabar con una orquesta consolidada, estuviese dejando pasar los meses para que, ante la imposibilidad de elaborar una programación a tiempo, la formación desapareciera por sí sola. Sea cual sea la intención del Gobierno extremeño, mientras no se aprueban los presupuestos, los miembros de la orquesta seguirán luchando por la continuidad de la misma, como confirma Ambrosio Castillo.

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